La compañía japonesa NEC presentó una herramienta que, por medio del uso de gafas inteligentes y de un smartwatch, permite proyectar un teclado virtual sobre el brazo del portador.
La herramienta es activada a través de los movimientos oculares efectuados, utilizando anteojos interactivos (que emplean la llamada “realidad aumentada”) y los sensores del reloj que captan lo tecleado por el usuario gracias a las vibraciones que se producen al hacerlo.
De esta manera la empresa pretende ayudar a los profesionales que necesitan trabajar con aparatos poco voluminosos, como ser aquellos que se desempeñan en tareas sanitarias o industriales.
El software desarrollado es capaz de almacenar datos en tiempo real y brindar mayor comodidad y movilidad a quien lo utilice, ya que por ejemplo, un profesional de la salud podrá ingresar rápidamente datos a la historia clínica de un paciente durante un procedimiento médico complejo.
La principal novedad del software radica en que no utiliza comandos de voz, que algunas veces no son reconocidos, y en eliminar el uso de aparatos muy grandes que dificulten el trabajo que se está realizando.
La firma, radicada en la ciudad de Tokio, estima ganancias elevadísimas en el transcurso de los próximos cinco años con este tipo de tecnologías que utiliza la “realidad aumentada”.
De cualquier manera, aún no ha dado a conocer con exactitud la fecha en que el producto comenzará a ser comercializado.